Inyección intramuscular | Revista de bienestar equino

inyección intramuscular

Cómo aplicarle una inyección intramuscular a tu caballo.

Aplicar una inyección intramuscular a su caballo puede parecer una tarea desalentadora, pero en realidad es bastante simple con el entrenamiento adecuado y la práctica supervisada. ¡Y es algo que todo dueño de caballos debería saber hacer!

La práctica hace la perfección

Si desea aprender a aplicar una inyección intramuscular, a menudo es tan fácil como pedirle a su veterinario que lo guíe durante el procedimiento y preguntarle si le permitirá administrar una inyección bajo su supervisión. Si tiene fobia a las agujas o no ha manipulado una aguja, consiga una de su veterinario o tienda para practicar. Las naranjas son buenos modelos de enseñanza para simular la sensación de empujar una aguja a través de la capa de piel dura hasta la capa de músculo más suave. No practique a caballo hasta que se sienta cómodo manejando la aguja y la jeringa. Su seguridad es lo primero y más importante: pincharse accidentalmente con una aguja o inyectarse algo no solo es doloroso, ¡sino que podría ser fatal! Además, tenga siempre precaución al destapar y volver a tapar la aguja.

Localiza tu objetivo

El principal lugar de inyección para una inyección intramuscular es el cuello. Aunque también se pueden utilizar otras zonas, el cuello es la zona más fácil y segura. Un triángulo forma los puntos de inyección en el cuello: la columna vertebral, la pendiente del hombro y la cresta del cuello. Es importante saber que las vértebras discurren por la parte inferior del cuello. Palpe estas protuberancias óseas y asegúrese de poder identificar con confianza la columna antes de cualquier inyección en el cuello. El lugar más peligroso para aplicar una inyección intramuscular es una articulación o la columna.

Pasos para inyectar

Una vez que haya localizado sus puntos de referencia, verifique la temperatura, el pulso y la frecuencia respiratoria de su caballo (nunca vacune a un caballo enfermo o estresado). Luego, use un hisopo con alcohol para limpiar el área y marcar su objetivo. Recuerda apuntar al centro del triángulo.

Hay dos técnicas principales de inserción: golpear el cuello del caballo con el puño cerrado (tres o cuatro veces) e insertar la aguja al mismo tiempo que el golpe, o pellizcar la piel con una mano e insertar lentamente la aguja justo detrás del pellizco. Ambos incluyen insertar la aguja hasta el centro (esto da como resultado una mejor absorción y menos posibilidades de reacción); tirar hacia atrás del émbolo para ver si entra sangre en la aguja (si lo hace, se debe sacar la aguja y redirigirla porque se encuentra en un vaso y no en un músculo); e inyectar.

Después de la inyección, se debe frotar enérgicamente el área para ayudar a eliminar la sensación de escozor.

Los ayudantes son útiles

Tener un guía competente facilitará mucho el proceso de aprendizaje. El guía debe permanecer del mismo lado que usted para que los cuartos traseros del caballo nunca se acerquen a usted. El guía puede usar golosinas y rasguños para distraer al caballo, mientras lo mantiene quieto. Tenga en cuenta que, por mucho que el caballo actúe como si la inyección fuera terrible, en realidad no duele tanto. Mantén la calma y la confianza y haz que la experiencia sea lo más positiva posible.

Por último, controle el lugar de la inyección para detectar calor, hinchazón, rigidez o infección después de todas las inyecciones y consulte siempre con su veterinario antes de administrar cualquier vacuna o si es importante saber que las vértebras se encuentran a lo largo de la parte inferior del cuello. Palpe estas protuberancias óseas y asegúrese de poder identificar con confianza la columna antes de cualquier inyección en el cuello. El lugar más peligroso para aplicar una inyección intramuscular es una articulación o la columna. surgen problemas.


Dra. Hannah Mueller Se graduó en 2004 en la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad Estatal de Oregón. Ella se esfuerza por brindar la mejor atención posible a sus pacientes y cree que su enfoque holístico único le permite hacerlo. La Dra. Hannah tiene una base sólida en medicina deportiva y cojera. Esto, junto con su formación en acupuntura, quiropráctica, ejercicios de estiramiento, técnicas de masaje y otras modalidades prácticas de curación, le permite a la Dra. Hannah rehabilitar caballos a su máximo potencial. Cedarbrookvet.com


Hannah Mueller, DVM se graduó en 2004 de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad Estatal de Oregón. Ella se esfuerza por brindar la mejor atención posible a sus pacientes y cree que su enfoque holístico único le permite hacerlo. La Dra. Hannah tiene una base sólida en medicina deportiva y cojera. Esto, junto con su formación en acupuntura, quiropráctica, ejercicios de estiramiento, técnicas de masaje y otras modalidades prácticas de curación, le permite rehabilitar caballos a su máximo potencial. Cedarbrookvet.com

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